HOMENAJE AL POETA ARGENTINO JOSE PEDRONI
JOSE PEDRONI - MENU  
  HOME
  BUSCAR EN ESTE SITIO
  BIOGRAFIA DE JOSE PEDRONI
  AUTOBIOGRAFIA, POR JOSE PEDRONI
  RECITADOS Y CANCIONES DE POEMAS DE JOSE PEDRONI
  VIDEOS SOBRE POEMAS DE JOSE PEDRONI
  ALBUM DE FOTOS DE JOSE PEDRONI
  OTROS SITIOS DE JOSE PEDRONI
  INDICE ALFABETICO DE POESIAS
  LIBRO 1 - La gota de agua - 1923
  LIBRO 2 - Gracia Plena - 1925
  LIBRO 3 - Poemas y palabras - 1935
  LIBRO 4 - Diez mujeres - 1937
  LIBRO 5 - El pan nuestro - 1941
  LIBRO 6 - Nueve cantos - 1944
  LIBRO 7 - Monsieur Jaquin - 1956
  LIBRO 8 - Cantos del hombre - 1960
  LIBRO 9 - Canto a Cuba - 1960
  LIBRO 10 - La hoja voladora - 1961
  LIBRO 11 - El nivel y su lágrima - 1963
  LIBRO 12 - Otros poemas
  POESIAS INEDITAS
  CARTAS
  => 1ª Carta a Bartolomé Vercelli
  => Carta de José Portogalo
  => 1ª Carta a José Portogalo
  => 2ª Carta a José Portogalo
  => 3ª Carta a José Portogalo
  => 4ª Carta a José Portogalo
  => 1ª Carta a Luis Gudiño Kramer
  => 2ª Carta a Luis Gudiño Kramer
  => Carta a Amelia Biagioni
  => 2ª Carta a Bartolomé Vercelli
  => 1ª Carta a Bernardo Verbitsky
  => Carta a Pablo Rojas Paz
  => Carta a Roberto Salama
  => 2ª Carta a Bernardo Verbitsky
  => 3ª Carta a Bartolomé Vercelli
  => 4ª Carta a Bartolomé Vercelli
  => Carta a Luis J. De Paola
  => Carta a Leticia Roffin
  => Carta a Carlos Carlino
  => Carta a Clorinda P. de Gudiño Kramer
  => Carta a Leónidas Barletta
  => Carta a Horacio J. Achaval
  => Carta a Juan I. Tamburini
  DISCURSOS
  ENTREVISTAS
  MISCELÁNEOS
  Zona del editor
AUTORIZACIONES POR COPYRIGHT Gestionar a través de: josebpedroni@yahoo.com.ar
Carta a Luis J. De Paola

Carta a Luis J. De Paola
(1)
 

Esperanza, 22 de noviembre de 1962
 
Señor Luis J. De Paola
Buenos Aires (Lobos)

 
Estimado joven:
 
                        No quiero dejar sin responder la amable carta de usted, llegada a mis manos cuando yo acababa de regresar de Centroamérica, no muy bien de salud y lleno de cosas y de compromisos; todo lo cual me atrasó considerablemente en la atención de la correspondencia, en forma tal que nunca podré ponerme al día. Cuánto se escribe, ¿no?
 
                        Esta carta tiene, pues, un doble objeto: justificar la demora con que le contesto y darle mi impresión sobre la muestra poética que usted se sirvió enviarme, esto último sobre una nueva lectura, que acabo de hacer, de sus cuatro epístolas.
 
                        Me gustan sus trabajos. Es usted, constitucionalmente, un poeta auténtico, de voz propia, llamado a hacer cosas perdurables, para todos, en razón de que quien escribe está viendo girar el mundo a su alrededor y se comunica con él mediante un lenguaje accesible, tal como lo aconsejaba Tolstoy(2) y en contra de los sostenido por Mallarmé(3) que abogaba por una poesía egoísta y desdeñosa, hija de la soledad, la sombra y el misterio. Porque aquella será siempre una poesía útil y ésta no pasará de un entretenimiento de mandarines «inclinados unos sobre otros, confiándose secretos al oído», los cual puede complacer a un Cocteau(4), pero no a nosotros que nos sentimos parte del pueblo y vivimos su peripecia.
 
                        Hay que ponerse del lado de la verdad, en contra de la mentira creadora de mitos y a favor de lo que es patrimonio común. Ello nos hará sensibles al mundo exterior, y nos dará alegría y optimismo, sin los cuales nunca se alcanzarán los secretos de la poesía sencilla y clara, pero trascendente, que complace y conmueve al hombre común, conquistando de él la simpatía y la esperanza. Hay que hablar con el hombre como un amigo, plegarse al ambiente, dialogar.
 
                        Para lograrlo, tenemos que hacernos entender, dejando de lado las fórmulas aristocratizantes y conquistando las altas planicies de la sencillez…, lo cual no es fácil, ciertamente. (Sólo yo sé cuánto me cuesta ser sencillo, cuánto padezco para llegar a la simple claridad.)
 
                        Volviendo a sus versos; me ha dado usted una alegría: poder decirle que me agradan, que son bellos, con mucha luz y fragancia. Tal vez advierta en ellos alguna imagen forzada; pero es poca en la pareja unidad del trigal que empieza a madurar.
 
                        Finalmente quiero agradecerle su Cantata, que me dedica. Grato es oír, al fondo del camino, la voz de la juventud que nos contesta –o nos despide−, haciéndonos saber, mientras avanzamos, que algo de lo que hicimos perdurará.
 
                        Enhorabuena y adelante. Lo estoy esperando.
 
                        Cordialmente de usted
 


José Pedroni
 

 
 
(1)     Luis Juan De Paola: Escritor argentino nacido en Lobos (Buenos Aires) en 1940. Falleció en Madrid (España) en 2008. (N del E)
(2)     Lev Nikoláyevich Tolstói o León Tolstoy: (1828 – 1910) novelista ruso considerado como uno de los más grandes escritores de occidente y de la literatura mundial. Sus más famosas obras son Guerra y Paz y Anna Karénina, y son tenidas como la cúspide del realismo. (N del E)
(3)     Stéphane Mallarmé: (1842 – 1898) poeta y crítico francés, uno de los grandes del siglo XIX, que representa la culminación y al mismo tiempo la superación del simbolismo francés. (N del E)
(4)     Jean Cocteau: (1889 – 1963) poeta, novelista, dramaturgo, pintor, diseñador, crítico y cineasta francés. (N del E)



JOSÉ PEDRONI EN FACEBOOK  
  José Pedroni en

Si te gusta la poesía de José Pedroni, puedes hacerte amigo; a través de Facebook te informaremos las novedades publicadas en este sitio.
 
Me gusta  
 
 
IMPRIMIR: Click abajo  
  IMPRIMIR ESTA PAGINA  
POETA  
  Yo fui niño una vez,
pero hace mucho.
Me dormía enroscado en la vereda.
Hay una voz que todavía escucho.
Hubo una mariposa. Era de seda.

Debió pisarme
alguna vez un hombre.
Debió mirarme una mujer dolida.
Yo no me acuerdo.
No tenía nombre.
Era, me acuerdo,
como liebre herida.

Enamorada de mi sangre sola
que se dormía al sol
en cualquier trigo,
la mariposa entraba en mi corola.

Yo no sé lo que ella hizo conmigo;
pero ella iba detrás de mi amapola,
ella y la voz que me llamaba amigo.

José Pedroni - 1961
 
SITUACIÓN  
  Paloma, espiga y ancla,
a 31 grados y 25 minutos
de latitud Sur
-línea del río y la calandria-
y 60 grados y 56 minutos
de longitud,
está mi tierra: Esperanza.

Es un pequeño punto palpitante
hacia el norte del mapa;
boya del trigo verde
corazón de la pampa.

José Pedroni - 1956
 
PLOMADA  
  Cuelga de un hilo de pescar la pesa
y es un pequeño mundo,
suspendido.
Un ángel invisible la sostiene.
Señala el centro de la tierra,
herido.

Sigue su vertical,
hombre constante,
y llegarás a Dios,
hombre afligido.

José Pedroni - 1963
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis