2ª Carta a Bartolomé Vercelli
Esperanza, 22 de diciembre de 1955
Querido Vercelli:
Días atrás tuve el gusto de leer en «Propósitos» las bellas palabras con que usted canta magníficamente mi tiempo que se fue en Gálvez. Se las agradezco de todo corazón. Fue para mí una muy agradable sorpresa el encuentro de su poema, no sólo por estar dedicado a mí, sino porque lo veo, como poeta, muy afinado en su voz y muy alto en la universalidad humana del mensaje, resuelto en imágenes bellas y exactas.
Si todos los trabajos que usted tenga hechos son así, creo que debiera ya reunirlos en un volumen y darlos al pueblo, tan necesitado de cosas que sirvan a su causa, y donde él se reconozca en esperanza y sufrimiento.
El pueblo ama la vida y está siempre a la espera de quienes ganen su corazón para amarla más, de quienes le ayuden en su generoso anhelo para mejorarla. Creo que usted debe pensar si no le ha llegado la hora de cumplir con este noble servicio, alegrando su propio corazón al hacerlo.
Conservaré entre mis recuerdos más queridos su generoso saludo poético que, repito, me ha gustado mucho. Lo digo sinceramente. Es bello, claro y puro, y tiene, además, el valor de venir de un hijo de pueblo y de ser, por tanto, una espiga madura de mi tierra.
Sinceramente suyo